Es difícil imaginar que otro invento, más allá de la rueda o el descubrimiento del fuego, pueda haber impactado más en el desarrollo de la civilización, que la capacidad de obtener agua potable.

Los pozos de agua más antiguos datan del neolítico, es decir, prácticamente hace 10.000 años. Nuestro planeta posee maneras increíbles de filtrar de manera natural el agua, y el ingenio humano se aprovecha de esto para que, con los pozos de agua, se pueda tener acceso a este vital elemento, y así poder subsistir.

A medida que las necesidades del ser humano se incrementan, la agricultura se vuelve más sofisticada, y los recursos se vuelven escasos, de ahí que, la necesidad de poder filtrar esta agua, se vuelva cada vez más importante.

Los filtros de agua para pozos subterráneos que se usan hoy en día tienen ya casi un siglo. Al inicio, se fabricaban de manera artesanal, y a medida que la tecnología mejoraba, este proceso fue automatizado.

INAMESA, una empresa peruana con una larga trayectoria, referente nacional en fabricaciones de acero inoxidable, ha desarrollado un filtro de bajo coste y buena versatilidad, utilizando un diseño tradicional, aprovechando tecnología de punta CNC (Computer Numerical Control), la cual es una gran alternativa frente a otros filtros de mayor precio para países emergentes.

El acero inoxidable es fundamental para esta fabricación, debido a la resistencia a la corrosión, durabilidad y facilidad de fabricación. Esto hace que el retorno de la inversión de un pozo de agua sea bastante atractiva. Dependiendo del caudal y profundidad de dichos pozos, los filtros pueden ser fabricados a la medida, típicamente con rangos de 8 a 16 pulgadas de diámetro y de 4 a 6 mm de espesor. Estas dimensiones son calculadas con exactitud con herramientas desarrolladas por INAMESA. Es importante utilizar acero inoxidable de un proveedor reconocido como ACERINOX para asegurar la calidad del material. Los filtros de acero inoxidable pueden durar hasta 10 veces más que similares fabricados con acero común.

Para esto, se ha acondicionado una máquina CNC con un diseño originalmente desarrollado en Europa para un proceso de troquelado manual, siendo el resultado final un filtro que por sus características de resistencia mecánica, área abierta, y flujo, sea ideal. Dichos resultados son avalados por las mejores Universidades e Institutos Técnicos del país.

La tecnología CNC asegura que el diseño sea uniforme, y esto ha permitido a INAMESA obtener certificación del producto por reconocidas entidades internacionales como la Société Générale de Surveillance (SGS), siendo la única empresa peruana en hacerlo. El ingenio y la dedicación utilizados en este novedoso diseño mecánico, ha permitido que INAMESA haya obtenido una patente, la cual se encuentra en proceso de publicación.