Con la expansión y evolución de la industria, surgen procesos de transformación en los que se fomenta el uso de “materiales sostenibles” que garanticen una mejora en las condiciones medioambientales de futuras generaciones.

El acero inoxidable destaca por sus características demostrables en múltiples aspectos. Su larga vida útil permite que no tengamos que reemplazarlo con tanta frecuencia, lo que reduce el consumo de recursos y minimiza los residuos. No se descompone y es 100% reciclable, reduciendo así el impacto en el medio ambiente. 

Para reciclar estos materiales la chatarra debe pasar por una serie de etapas que garanticen su trazabilidad y aseguren el correcto comportamiento. Priorizar el uso de materiales reciclables como el inoxidable, en lugar de materiales desechables o de vida útil corta, ayuda a proteger y progresar en las acciones para el cuidado del medio ambiente. 

 Y tú ¿utilizas materiales sostenibles en tu día a día?