Innovación y calidad al servicio del frío

La refrigeración industrial juega un papel esencial en diversos sectores clave, desde la hostelería hasta la industria biomédica, asegurando el almacenamiento adecuado y seguro de productos perecederos y sensibles. 

En este contexto, empresas especializadas han desarrollado soluciones avanzadas que garantizan el control preciso de la temperatura, ofrecen eficiencia energética y un diseño adaptado a las necesidades de cada sector.

En el ámbito HORECA (hoteles, restaurantes y catering) y supermercados, la refrigeración industrial es un elemento esencial para garantizar la conservación de los alimentos en condiciones óptimas. Equipos como armarios de refrigeración, neveras y vitrinas están diseñados para ofrecer uniformidad en la temperatura, algo fundamental para evitar la proliferación de bacterias y asegurar la frescura de los productos.

Estos equipos están diseñados pensando en la funcionalidad, pero también en la estética, adaptándose a las necesidades de diseño y espacio de cada establecimiento.

La refrigeración en biomedicina requiere una precisión extrema. En hospitales, laboratorios y farmacias, los equipos de refrigeración deben garantizar la estabilidad de temperatura las 24 horas del día, los 365 días del año, para conservar medicamentos, vacunas y muestras biológicas sensibles. La fiabilidad de los equipos en este sector es crucial, ya que la integridad de estos productos afecta directamente a la salud y los resultados clínicos. Equipos especializados, con funciones avanzadas y alarmas de seguridad, están diseñados para cumplir con los estrictos estándares de calidad del sector médico.

Uno de los materiales fundamentales en la fabricación de equipos de refrigeración industrial es el acero inoxidable. Este material destaca por su durabilidad, resistencia a la corrosión y  garantiza altos niveles de higiene, lo cual es esencial tanto en la industria alimentaria como en la biomédica.

Existen diferentes tipos de acero inoxidable que se utilizan según el entorno y las exigencias de los equipos. La elección del tipo de acero inoxidable garantiza que los equipos puedan soportar condiciones adversas, como la exposición a ambientes húmedos o productos químicos, sin comprometer su funcionamiento.